Se pudiera pensar que una persona con filofobia puede evitar amores potenciales o relaciones que tomen el rumbo romántico, pero pueden incluso aislarse de compañeros, amigos y familiares ya que el amor no solo se siente por la pareja si no por aquellos que tenemos a nuestro alrededor, lo que hace esta fobia especialmente disruptiva en la vida diaria del que la padece.
Algunos factores que pueden influir en el desarrollo de la filofobia son:
- Crecer en un ambiente ansioso y falta de seguridad dónde aprendió desde pequeño a no confiar.
- Sobreprotección extrema en la infancia.
- Hogares rotos en los que el padre o la madre expresa que no es bueno enamorarse o expresiones de ese tipo.
- Haber experimentado una relación tóxica.
- Temor a perder la libertad o temor al compromiso.
Entonces, si tú ya viste en la oficina o en la calle a aquel o aquella que será tu pareja, pero aún no lo sabe te recomiendo que cheques estos síntomas para que puedas saber si puede tener filofobia, o, puedes checar también si tú los presentas:
- Muestran evasivas ante el compromiso
- No arriesgan sus sentimientos
- Tienen relaciones intermitentes
- Sus relaciones son conflictivas
- Constantemente piden tiempo o se alejan
- Se ven más frustrados en pareja que solteros
- No les gusta sufrir
- Establecen compromisos poco estables incluso con sus relaciones de amistad
- Ataques de pánico al estar con una persona del sexo opuesto
- Falta de aire y deseo de abandonar la situación lo antes posible
El amor es la emoción más intensa con la que cuenta el ser humano en ese gran catálogo de emociones, trastorna nuestro equilibrio químico, cerebral y por ende todo en nuestro ser, es por ello que el temor al amor es también muy grande y debe ser tratado para poder tener relaciones de amistad, familiares o de pareja en caso de así desearlo.