Tristemente, todavía hoy en día, no se reconoce la labor tan importante de los profesionales de la LOGOPEDIA.
“Mi hija no habla, no mastica y me dicen que no necesita logopedia”. Esta es la historia de Catalina, madre de Marina, que tiene tres años y le han diagnosticado un Trastorno del Espectro Autista y tiene problemas para desarrollarse, pero solo recibe terapia psicológica. La logopedia y la terapia ocupacional las tiene que recibir por la vía privada.
Esta es la historia de Catalina, madre de Marina, que tiene tres años y le han diagnosticado un Trastorno del Espectro Autista y tiene problemas para desarrollarse, pero solo recibe terapia psicológica. La logopedia y la terapia ocupacional las tiene que recibir por la vía privada.
Catalina, que ha estado en ‘La Tarde’, junto a más madres y familiares que forman parte de la Plataforma ‘Ningún niño sin terapia’, han entregado este miércoles en el Congreso 350.000 firmas para pedir que los niños reciban la ayuda pública mientras el niño la necesite, porque no todos tienen los medios económicos suficientes. Además quieren que se aumenten las horas de terapia.
Ahora, los niños solo reciben terapia hasta los seis años, e incluso en algunas comunidades autónomas hasta los tres, por lo que si se quiere seguir recibiendo ayuda, sus padres tendrán que acudir a una consulta privada.
Han entregado este miércoles en el Congreso 350.000 firmas
Dependiendo de la terapia se paga entre 200 a 1000 euros al mes por una hora a la semana. Por eso la madre de Marina, Catalina, ha enviado una carta a la Consejería de Salud del Gobierno Balear, y al Ministerio de Sanidad en la que cuenta su caso y lanza estas dos preguntas: ¿Qué pasa con esos niños? ¿Acaso cuando cumplen 6 años sus dificultades desaparecen?
El caso de Marina no es único. Cientos de familias están pasando por algo similar. Estamos hablando de niños que sufren retraso madurativo, autismo, parálisis cerebral, síndrome de down y necesitan ayuda
Gerard es de Baleares, cumple seis años en enero, y entonces dejará de recibir estas sesiones gratuitas. Cuando tenía dos años y medio le diagnosticaron un autismo grado 2/3 no verbal, y no habla. Además, sus padres pagan 700 euros al mes para que pueda trabajar con una psicóloga. Durante este tiempo ha mejorado mucho.
Gerard ha empezado a señalar, se gira cuando le llamas, y se comunica a través del libro de pictogramas, donde los dibujos sustituyen a las palabras. También es mucho más cariñoso. Mara es la madre de Gerard y también ha estado en ‘La Tarde’, donde ha contado que se vuelven a Baleares después de las dos reuniones que han mantenido en el Congreso con varias diputadas “con mucha ilusión”.
“Nos han dado muchas más esperanzas, nos han dado más salidas de lo que nosotras sabíamos de lo que podíamos llegar”, celebra Mara, quien ha contado que a Gerard “solo le entran dos sesiones de psicóloga a la semana. En enero que cumple seis años se lo retiran. Estamos pagando 700 euros al mes que se incrementan a mil si queremos las dos sesiones de psicología”.
Aun así, Mara insiste y en se vuelven a casa “optimistas, mejor que ayer. Tenemos muchas esperanzas en esto, estamos gastando mucha energía”. “No sabíamos que iba a ser algo tan trascendental”.
Catalina lo tiene muy claro: “Si tienes dinero, la niña va a avanzar. Si no tienes, va a retroceder”. “Tenemos que ir avanzando camino para que ella lo asimile”.
Bea es la madre de Iker, y ambos han estado también en los estudios de la Cadena COPE. “Iker tiene parálisis cerebral de nacimiento y una discapacidad motórica del 90 por ciento. Intelectualmente no tiene afectación por suerte. Todo lo que le cuesta es motor. Este año ha dejado de recibir esa atención temprana”, ha explicado Bea, que a partir de ahora tendrá que “costear los tratamientos por la vía privada”. “Nos gastamos más de mil euros mensuales”
La reclamación de que se incremente el tiempo de tratamiento, es que «tenemos informes medico que dicen que si Iker no recibe esos tratamientos tiene un retroceso muscular».
“Se deforma, pudiendo tener que ser intervenido, puede haber desviaciones de columna, contracciones musculares. Este verano lo operaron y tuvo que tener descanso por dos meses de las terapias y se notó muchísimo lo que retrocedió”, apunta Bea.
Iker, que es del Villarreal y amigo de Manu Trigueros, acude a la terapia con sus padres y «algunas veces también viene mi abuela conmigo».
«El otro día estuve en una y me dijeron que las terapias no eran buenas para mi», ha contado Iker.