Ya no queda nada para el verano y las vacaciones, y con ellas los niños en casa, en muchos casos aburridos y persiguiéndonos para que juguemos con ellos.
Si queréis divertiros con ellos y al mismo tiempo introducirles en el mundo del yoga, aquí os traemos unas ideas frescas y divertidas para ponerlas en práctica en estos días de vacaciones y descanso.
- El escondite inglés (de yoga, claro). El clásico juego en el que gana el primer niño que llega a la pared donde está contando el compañero que se la liga. En vez de ‘un, dos, tres, al escondite inglés sin mover las manos ni los pies’ cantaremos ‘un, dos, tres, un árbol quiero ver’ o si preferimos en inglés ‘one, two, three, a tree I want to see’. Todos los niños al quedarse inmóviles, deberán formar la postura del árbol. ¡Un juego donde no faltarán risas!
- El periódico musical. En este juego repartimos las hojas de un periódico por el suelo (tantas como niños vayan a jugar) y ponemos música para que los pequeños bailen. Cuando de improviso la paremos, todos los niños deberán pararse sobre una hoja formando alguna postura de yoga que previamente habremos acordado, de nuevo el árbol da mucho juego al ser una postura de equilibrio. Según avanza el juego iremos retirando hojas del suelo, de modo que los niños tendrán que empezar a compartir las que quedan y apretujarse.
- Comiendo fruta en atención plena. Se trata simplemente de preparar una fuente con diversas frutas y dárselas a probar a los niños de una en una. Deberán tener los ojos vendados y saborearlas lentamente, como si nunca antes la hubiesen comido, y por supuesto adivinar cual es.
- Trabajando la confianza. Un niño con los ojos vendados es guiado por otro en un agradable paseo, tal vez por un jardín, lenta y tranquilamente, y le irá descubriendo diferentes olores, sonidos, sensaciones…
Por Cristina Hernández, profesora de Yoga online en www.aomm.tv