Desde muy pequeños la sociedad nos moldea y hace divisiones según nuestro género. Puede parecer imperceptible al comienzo, después de todo, nos hemos acostumbrado a juzgar de esa manera las cosas. Muchos creen que ya es tiempo de derribar los estereotipos ridículos. Los niños no tienen por qué pensar que el color rosado y las muñecas son algo prohibido para ellos. Así también las chicas no deberían verse forzadas a sólo jugar haciendo reuniones de té, si lo que en verdad desean es correr y simular que combaten contra monstruos invisibles.
Una cadena de supermercados francesa llamada Systeme U ha querido contribuir al cambio de pensamiento. Para ello, creó este fantástico comercial en donde queda claro lo mucho que son afectados los niños por las convenciones sociales. Vale la pena verlo y sacar conclusiones propias: