El día de su fallecimiento, Kim Peek pasó toda la mañana abriendo tarjetas de navidad acompañado de Francis, su padre, quien fue a su vez su gran amigo. Kim no padecía ninguna enfermedad, nada parecía presagiar que ese día su vida se apagaría para siempre. Había estado junto a su familia preparando los regalos para tan señaladas fechas. Ese mismo 19 de diciembre, un infarto desplomó a Kim en el suelo. Fallecía así un hombre cuya mente había asombrado al mundo, cuya historia motivó una gran película. Sus capacidades eran tan absolutamente inverosímiles que hasta la NASA, así como múltiples universidades en EEUU estudiaron en profundidad de dónde provenían tamañas habilidades. Acababa de cumplir 58 años de edad.
Nació en 1951. El mismo día de su nacimiento, los médicos que llevaron el parto comunicaron a sus padres que Kim sufría de un acusado retraso mental, que con mucha seguridad no le permitiría andar, y recomendaron que Kim fuera internado en un centro donde pudieran atenderlo. SIn embargo, los padres de Kim no estuvieron conformes con esa idea.
Fue diagnosticado de macrocefalia, esto es, un cráneo de proporciones anormalmente grandes, y su cerebro no tenía cuerpo calloso, el tejido que conecta los dos hemisferios del cerebro y que permite la intercambio de información entre células. Se especula con que al carecer de cuerpo calloso, sus neuronas fueron creando sus tejidos sin freno, uniéndose entre sí y formando una masa compacta de conexiones capaz de retener hasta el 98% de todo lo que veía o escuchaba.
Francis Peek, su padre, solía contar que, a la corta edad de año y medio, Kim era capaz de memorizar cada libro que le contaban. Desplazaban el dedo de Kim sobre cada frase, al tiempo que iban pronunciando los sonidos para que Kim los aprendiera. De este modo, llegaron a advertir como Kim podía recordar un libro después de haberlo leído una única vez. Cuando terminaba de leer un libro, Kim lo ponía boca abajo, como si ese libro ya no fuera necesario en absoluto. Ese hábito permaneció en él durante toda su vida.
A la edad de tres años, Kim preguntó a su madre cuál era el significado de la palabra “confidencial”. Su madre, con el fin de estimular a Kim, le contestó que podía buscarlo en el diccionario. A partir de ahí aprendió a localizar las palabras en orden alfabético para posteriormente leer cada uno de los significados. Durante su vida llegó a leer y a memorizar un total de nueve mil libros. Se calculó que podía leer dos páginas en un lapso de 8 a diez segundos, ya que usaba el ojo izquierdo para leer la página izquierda, mientras que con el ojo derecho leía la página derecha.
Fue incapaz de andar hasta que cumplió los 4 años de edad. Ya entonces vivía cautivado por los números y la aritmética, solía leer listines telefónicos y se entretenía sumando columnas enteras de números de teléfono, y lo mismo hacía con los dígitos de las matrículas de los coches.
A partir de 1969, Kim trabajó en un taller especial para adultos con discapacidad. Simplemente con su mente, sin calculadores ni ordenadores, era capaz de resolver toda la contabilidad de la empresa. No obstante, sus dificultades motoras y de coordinación fueron lastrando su vida. Su padre tenía que ayudarlo en tareas cotidianas como abrocharse los botones de la camisa, atarse los cordones de los zapatos… Y aunque tenía la capacidad de memorizar casi con absoluta precisión cualquier texto que leía, no podía interpretar o sacar conclusiones de sus lecturas.
En su libro “The Real Rain Man”, Francis Peek describió a su hijo en estos términos: “Kim no es un autista. De hecho, su personalidad es cálida y cariñosa. Kim se preocupa auténticamente por las personas y gusta de compartir con ellos sus habilidades únicas. Sus conocimientos enciclopédicos incluyen disciplinas como la historia, biografías, geografía, deportes, ingeniería, cine… También conoce en profundidad La Biblia, la historia de la Iglesia Mormona, el calendario (puede adivinar fechas), literatura… Puede identificar casi cualquier composición de música clásica, así como las fechas y lugar de nacimiento y fallecimiento del compositor. Además, se mantiene informado sobre la actualidad en el mundo y en los EEUU”.