Las crisis de pánico siempre tienen un origen traumático, una experiencia adversa que la persona vivió y no pudo procesar emocionalmente de manera adecuada, muchas veces la persona no relaciona el hecho que lo origina hasta que comienza la terapia EMDR. Si usted sufre de Crisis de Pánico la terapia EMDR es su solución.
Las crisis o ataques de pánico fueron categorizados por la OMS ya en 1980 y es una dolencia comprendida dentro de los trastornos de ansiedad afectando a un 30% de la población mundial, es decir, tres de cada diez personas padecen este trastorno.
Se caracteriza por la instalación súbita de un temor o miedo intenso no especificado sin un estímulo externo que lo gatille aparentemente, esto, acompañado de sintomatología emocional, física y cognitiva como pensar que algo terrible esté por suceder, querer escapar, miedo al desmayo y al descontrol, sensación de irrealidad o de extrañeza acerca de lo que pasa o de uno mismo y sensación de estar como en un túnel, como si estuviera obnubilado. Es muy frecuente que las personas que padecen este trastorno piensen que se van a morir, se van a volver locos o ambas cosas.
Los síntomas físicos más recurrentes son palpitaciones, sudoración, temblor de manos, piernas flojas, náuseas, molestias abdominales, mareos, dolor de cabeza, opresión en el pecho, sensación de ahogo o falta de aire y sofocación, pueden también sentir hormigueos en extremidades al comienzo de las crisis. Muchas veces todo se ve un poco más brillante ya que se dilatan las pupilas, en resumen, los síntomas son los de cualquier mamífero en estado de alerta, la diferencia es que no existe un estímulo adverso real que provoque este estado, por lo que se puede hacer cada vez más frecuente e incapacitante para la persona produciendo conductas de evitación como no salir a la calle, evitar todo tipo de contacto “que pudiese” estimular una crisis.
Las crisis de pánico son desorganizantes, ya que la sensación de malestar luego de las crisis puede durar días junto con el miedo que vuelvan a ocurrir.
Si una persona presenta por primera vez uno de estos episodios debe recurrir en seguida a un Servicio de Urgencia para descartar una enfermedad que requiera tratamiento de emergencia.
Al descartar el origen orgánico del trastorno se hipotetiza un origen psicológico.
EMDR y Trastorno de Pánico
Por lo general el tratamiento es farmacológico, dismuyendo la intensidad y frecuencia de los episodios, en ocasiones con remisión total de sintomatología, pero otras veces no. En estas ocasiones es cuando la terapia de reprocesamiento del trauma EMDR es recomendada para remisión total de sintomatología independiente cuantos años lo padezca. El protocolo aborda tres importantes hitos desde la primera crisis en los cuales el sujeto reprocesará a nivel emocional el origen del trastorno. Las personas tienden a buscar en la actualidad lo que gatillan las crisis y al no encontrar la supuesta causa actual se frustran y esto genera un aumento en los niveles ansiógenos.