La Lengua de Signos existe de hace mucho tiempo, incluso antes de que se volviera una lengua con signos con signifacos concretos. Hacemos señas para comunicarnos con otra persona cuyo idioma es muy distinta a la nuestra. También cuando falla intentar comunicarse en una tercera lengua.
Para las personas sordomudas es su manera de comunicarse. Y lamentablemente muchas veces se encuentran en lugares, como un edificio público o un banco, en el que no hay un empleado que comprenda los signos.
Esta semana en el Senado de la Provincia de Buenos Aires se sancionó un proyecto de ley que obliga una capacitación a empleados, que trabajen en atención al público, para aprender dicha lengua. La capacitación en Lengua de Señas Argentina (LSA) alcanzará a los trabajadores en ministerios, secretarías, direcciones, organismos y entes autárquicos dependientes del gobierno bonaerense.
La iniciativa, elaborada por el diputado del Frente para la Victoria Leonel Zacca, ya contaba con media sanción de la Cámara baja.
En su artículo 3, la ley establece que “cada dependencia gubernamental contará con un Registro de Voluntarios para ser formados en Lengua de Señas Argentina, los cuales finalizada dicha capacitación e incorporados a la función específica, habrán de recibir un plus salarial por tal ocupación”. También se contempla en el mismo artículo que “en el caso de existir personal que posea el conocimiento de este tipo especial de lenguaje, y que pueda acreditarlo apropiadamente, la dependencia en donde desempeñe funciones, podrá en caso de considerarlo necesario, incorporarlo a la función de atención al público sordomudo sin la necesidad de la formación previa, pero si abonándole el plus salarial por dicha función”.
Además, dispone el llamado a concurso público para cubrir los cargos de profesores en LSA que capaciten al personal. Así como crear una guía de trámites para el sitio web gubernamental y un convenio con la Confederación Argentina de Sordomudos (CAS) fiscalice el funcionamiento del curso.