Ahora que se empieza a hablar de ‘desescalada’ y que todavía muchos ciudadanos no saben cómo afrontarla, desde Psicólog@s en Casa establecen una serie de recomendaciones para afrontar la desescalada del Estado de Alarma de la Covid-19, así como los efectos emocionales y económicos de la crisis sanitaria y económica.
«La vuelta a la normalidad
plantea muchos retos para la sociedad en los próximos meses», apunta
Natalia Pedrajas, directora de Psicólog@s en Casa: «El miedo a
contagiarse de los más mayores, la reinvención de muchos autónomos que han perdido su trabajo, rupturas de pareja, el duelo de los niños, la continuidad del teletrabajo de los padres…».
Nuestros mayores
A 28 de abril, España registra 23.822 fallecidos por coronavirus. Un 60% superaban los 60 años y un 95% ya tenía 80 o más. Durante el confinamiento muchos de los mayores de nuestra tercera y cuarta edad han acentuado sus cuadros de depresión y ansiedad. «Al dejar de sentirse útiles porque han perdido su actividad habitual y el contacto físico con sus nietos, también han sufrido una bajada de la autoestima«, subraya Natalia Pedrajas.
De cara a su salida progresiva del confinamiento, Psicólog@s en Casa recomienda que no desarrollen amenazas imaginarias porque les hacen aún más vulnerables. «El miedo por exceso genera estrés y ansiedad, rebajando las defensas de su sistema inmunológico», explica Natalia Pedrajas. «Por el contrario, pensar que todo está solucionado conduce a saltarse las medidas de seguridad, como algunos padres durante su primer día de salida con menores», añade.
Aunque el Estado de Alarma se ha decretado hasta el 10 de mayo, todo indica que el Gobierno lo prorrogará otros 15 días. Psicólog@s en Casa insiste en sustituir el distanciamiento físico por acercamiento emocional, aunando creatividad y nuevas tecnologías. «Disfrázate y envíale a tu madre un vídeo cantando su canción favorita», propone Natalia Pedrajas. También invita a que las enfermeras y enfermeros de las residencias lean a los mayores los mensajes de sus hijos y nietos.
Muchos han perdido a seres queridos sin siquiera poder despedirse. En estos duelos a distancia, «pequeños rituales como realizar un altar con fotos son una manera reparadora de empezar a decir adiós en casa», apunta Natalia Pedrajas.
Autónomos y desempleados
Según los últimos datos del Servicio Público de Empleo Estatal, cerca de 9 millones de personas ya se encuentran en situación económica de paro. Entre ellos, 1’12 millones de autónomos han solicitado ayuda por el cese de actividad o reducción de ingresos superior al 75%. El turismo, el pequeño comercio, la hostelería y la restauración figuran entre los sectores más afectados. En una primera fase, Psicólog@s en Casa les recomienda «aceptar la pérdida del empleo desde una tristeza reflexiva y no depresiva».
«Después pasarán a ejecutar sus planes de reinvención laboral
motivados por una rabia sana, y no desde el odio, la crítica ni la
culpabilidad», continúa Natalia Pedrajas. Destaca como ejemplo a seguir
los hoteles y restaurantes, que «ya han diseñado medidas creativas para
poner en marcha sus negocios dentro de las nuevas exigencias de la
crisis sanitaria».
Parejas y menores
La convivencia de la cuarentena intensifica los procesos de separación de parejas con problemas previos. Aunque se recomienda no tomar decisiones sino intentar convivir, Natalia Pedrajas reconoce que «muchos matrimonios ya deteriorados consolidan sus planes de divorcio para cuando concluya el encierro«. «Al no poder salir de casa, sólo sigues mirando tu reflejo frente al espejo, y eso llega a ser muy doloroso», añade.
Muchos empleados de grandes empresas no regresarán a la oficina hasta después del verano y los niños no volverán al colegio hasta septiembre. «Una conciliación saludable requiere poner un límiterazonable al teletrabajo», subraya la psicóloga Carla Rodríguez. «Su exceso provoca una caída del rendimiento y está ligado a la ansiedad e insatisfacción crónicas de nuestra sociedad», añade.
Respecto al cambio de sueño de los niños, Carla Rodríguez propone finalizar la jornada con retos mentales que les ayuden a desconectar. «No se trata de gastarlos físicamente, ya que su cansancio físico no se traduce en cansancio mental», aclara.
La cuarentena también es buen momento para introducirles en el concepto de la muerte, siempre según edad. «Los niños no permanecen ajenos a los duelos, no sólo porque haya fallecido algún familiar, sino también porque no pueden escapar de las noticias televisivas, los comentarios en redes sociales o las conversaciones de sus padres», explica Natalia Pedrajas.
Los
más pequeños acusan en silencio la falta de contacto con sus compañeros
de clase. Para que vuelvan a sentirse cerca, Psicólog@s en Casa
recomienda que los padres organicen vídeo-charlas entre los niños. «Los
adolescentes sufren menos esta ausencia ya que siguen interactuando a
través de WhatsApp, redes sociales y vídeojuegos», añade laexperta.
El sueño de los sanitarios
Para los sanitarios que no concilian el sueño, Psicólog@s en Casa propone la escritura creativoterapéutica. «Viven una situación de guerra que sólo sobrellevarán si la hacen suya», explica Natalia Pedrajas. Durante una semana, les invita cada noche a escribir un título y unas líneas sobre la película de su día. «Les ayudará a contar su experiencia a los demás en el futuro», concluye.
¿Cómo afrontar el miedo al futuro? «La incertidumbre ante los próximos meses provoca ansiedad y estrés», reconoce Carla Rodríguez, que aconseja recrear algunos escenarios posibles y diseñar un plan para cada uno. «Por ejemplo, que haría si no recupero el trabajo. Así, anticipamos a quién pediremos ayuda y qué recursos emplearemos, nos vamos generando seguridad», explica.
Como sanitarios autorizados, Psicólog@s en Casa atiende a domicilio los casos más graves, cumpliendo con todas las normas de seguridad. Gestión emocional, duelos y pre-duelos, ansiedad, depresión y alimentación consciente están entre las terapias habituales de la crisis. «La mochila que cargábamos antes se ha hecho más pesada y difícil de gestionar», explica Natalia Pedrajas.
Así, muchos abusan de una mala alimentación, tabaco, alcohol y drogas porque «reproducen en casa sus viejas maneras de enfrentarse a los problemas». «Ahora debemos apoyarnos en nuevos bastones. Por ejemplo, el deporte», remata la psicóloga. Sin duda, tras la desescalada cada uno tendremos una nueva forma de estar en el mundo.